Vale,
llevaba en blanco mucho tiempo. Que no suene mal lo anterior, a veces las ideas
que están en blanco son muy buenas ideas. No siempre es malo no hacer nada, es
mejor que equivocarse. Aunque hoy voy a defender el error.
¿Cuál es el
error, perder o dormir? Solemos plantear dos alternativas, gano o pierdo. Para
muchos (quizás, hasta yo sea uno de ellos, en ocasiones) hay una tercera,
dormir. Nos pasamos la vida durmiendo, desaprovechando el tiempo, o quizás
escondiéndonos de él. Lo que no sabemos es que el tiempo no se para a
buscarnos, pasa de largo, y claro está, lo perdemos. Pasamos de esta
alternativa, no tiene ningún beneficio. La opción de equivocarse, normalmente
siempre es beneficiosa. Siempre suelo creer que la opción al luchar es la derrota. Es la
primera opción que planteo, (el hecho de si sale bien, pues mira una alegría y
si no pues ya me lo esperaba, MENTIRA). Pues bueno, me lo planteo, al igual que
justo en frente, en la otra orilla está la opción por la que lucho. La opción
de obtener lo que quiero. Si no hubiese una opción de ganar, no habría ninguna
opción por la que luchar. Muchas veces el ganar, es el simple hecho de
desahogarse, de conseguir expulsar lo que sobraba. No siempre nos falta algo,
en su mayoría nos sobra.
Bueno, como
veis, esto no es más que una tontería. Que cuatro leeréis, y yo, no sé si me he
equivocado o no, pero me he desahogado, por lo tanto, he ganado.